lunes, 14 de marzo de 2011

El regreso

Y hoy fue el primer día de clases de la universidad. En general, y como dije ayer, entusiasmado entusiasmado no estaba, pero sí me daba cierta alegría ver a la gente de nuevo. Mi primera clase era práctica de campo II. Ya desde ayer tenía dudas sobre si habría clase o no, hasta estaba pensando en no ir, pero por si acaso -dije- iré. Pues resulta que una vez más me tocó esperar -nos tocó, en realidad- porque el profe nunca llegó. Eran las 11:30 am y nunca llegó, así que no quedó de otra más que tontear y hacer tiempo hasta la hora de almuerzo y después entrar a la otra clase (Estadística) que era con el mismo profe. Pero, más allá de eso, tontear y comer con mis amigas fue bueno y divertido. Fue como si no hubiese pasado el tiempo y no hubiésemes tenido vacaciones. Aunque todos acordamos que unos días más libres no habrían caido mal.

No vi a mucha de la gente hoy porque algunos ya habían tenido clase más temprano y se habían ido. En fin, supongo que en estos días veré a muchos de ellos, sería bacán. Por otro lado, en la clase de estadística estaba que me moría de sueño, me hacía falta la siesta de la tarde, pero estuvo buena al final. El profe nos comentó que ha hecho algunas modificaciones al curso en comparación con lo que dictó el ciclo pasado, así que espero que me vaya bien. Lo que sí no me gustó mucho fue que nos tomó una prueba de entrada, como para explorar nuestros "conocimientos" en estadística. En realidad, la prueba no era nada formal y no afecta nuestra nota pero claro que no me acordaba de nada. Hace como dos años que no veo ni pienso en números; hace dos años fue la última vez que llevé el curso en Letras y no es que yo sea un capo en esa materia. Así que la prueba de entrada de hoy no fue una buena manera de levantar la moral de alumnos que, en su mayoría, no se llevan bien con los números.

Otra cosa que no me gustó mucho fue que somos demasiadas personas en la clase. Seremos como 36 alumnos y eso ya de por sí me provoca cierta tensión. Definitivamente hoy comprobé que no me siento cómodo cuando estoy rodeado de mucha gente, mi cerebro se bloquea. Creo que rindo mejor cuando no estoy con tanta gente, o cuando las clases son más pequeñas. Ya me ha pasado. Me gusta más conversar con grupos de pocas personas, no sé, simplemente me siento mejor, las cosas fluyen. En fin, no me queda de otra más que tratar de que eso no me afecte y que mi desempeño sea bueno. 
 
Ahora mañana tengo el curso de Teoría 4, antes llamado Teoría 2, y espero que no nos sorprendan con pruebitas ni nada por el estilo. Aunque no creo. Luego -ahora sí- tengo reunión de Campo que, según el profe, no durará más me media hora.
En fin, veremos que sucede mañana. Ahí nos vemos!

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